fluye con facilida...

Eterno Retorno

Creo que averigüé a que se refería Nietzsche con que el tiempo es cíclico. No por lo que dicen los filósofos… acerca de creer que un día volveremos al comienzo del inicio. No porque un día somos grandes y al otro somos niños. No porque olvidaremos el progreso de toda una vida. Yo creo que se refería al tiempo de los amantes. No soy filosofa, pero hoy me siento como un amante. No por amar a alguien, a pesar de que si lo hago. Sino por querer creer en algo que no tiene sentido alguno. Quizás mañana me tacharán de loca y encontrarán un nido de pájaros en vez de cerebro. Siempre me han gustado los pájaros, desde que tengo uso de razón. Poco tiempo atrás o cada vez que me percato que soy humano. Aunque ese puede ser el sinsentido más grande. De todos modos, creo que en eso consiste y que Nietzsche no estaba tan desquiciado como todos pensaban. Volveremos a conocer a quienes ya conocimos. El eterno retorno, romántico y desastroso.

La suricata

Ya no estoy. Tengo el sí gritando en mi cuerpo y el no lo contiene, lo vuelve cauto. Ando con cautela, porque soy animal con ganas. Ganas de piel caliente. Lo malo de hoy es que necesito hablar. Todos creen que hablo mucho, y lo que digo no siempre alcanza para expresarme. Y me quedo atrapada en la boca. Con las ganas de ser menos animal. Lo bueno de hoy es que vuelvo. Tengo miedo de no gustarme lo suficiente,y odiarme demasiado. Pero no pierdo nada en el camino. Voy sola. Y me vuelvo a sentir bestia por creer necesitar compañía. Soy un animal con razón que no razona. Eso me convierte en un humano menos. No creo en iglesias, no me gustan los bordes del pan, me da asco la crema pastelera y un montón de otras cosas. A mis pies les gusta la arena y creo que podría caminar con las manos. Asomarme sigilosa para ver que nadie me ve. Y correr entre gente, bares, playas y muertos. Defensa. Esconderme. Soy una cosa llena de nervios y conexiones. Sinapsis, cuerdas, notas, manos y besos. Y los hilos entre cuerpos son sagrados. Soy una suricata sin cautela. Me enamoro un poco todos los días. De conocidos extraños, desconocidos familiares, rostros, palabras, cuerpos y armas. Suena de puta, pero amo el amor. Es una inversión a largo plazo. Se retribuyen lunares, cicatrices, picazón y calor. Si tienes suerte existe la conexión de la que hablo. Una sinapsis entre los cuerpos magnos. Somos gigantes que se comen. Soy una fuente. Y lo único que quiero decir es: 'tengo mucho que contarte'.